Monday, June 27, 2011

MENOPAUSIA



La menopausia, y el climaterio son los términos que la mayoría de las personas tienen claro en lo que consiste los mismo, como: una fase de la vida normal de la mujer, hoy en día debido a las características que presenta nuestra sociedad son más las mujeres que alcanzan este proceso normal del desarrollo de la persona.

Para la mayoría de las mujeres, una tercera parte de la vida ocurre después de la menopausia. Cada mujer vive la menopausia de manera diferente. Algunas no tienen molestias, pero otras sienten malestares emocionales y físicos. Por eso es importante controlar los problemas relacionados con ella.

A través del tiempo, se han presentado varias actitudes y creencias respecto a la menopausia que han variado ampliamente. La menopausia se ha considerado de distintas perspectivas desde una enfermedad y un signo de decadencia en el siglo XIX hasta una etapa de liberación en la que finaliza la etapa fértil. La mayoría de las mujeres actualmente perciben la menopausia con alivio y sentimientos neutros y/o como una etapa de cambios positivos. Al revisar la amplia información sobre la menopausia nos muestra que las diferentes actitudes y creencias hacia la menopausia se explican por la combinación de factores personales y culturales.

Este estudio realizado, además de profundizar los aspectos más importantes sobre este proceso natural de cada mujer, debe proporcionar los elementos necesarios para la mejor manera de saber y comprender sobre el tema, y datos que posibilite el estudio de la pre valencia y de las principales características, causas y síntomas referentes a la menopausia.

La realización de este trabajo tiene como objetivo una investigación centrada en el conocimiento de cualidades sobre el entendimiento de la menopausia, de sus factores y de sus repercusiones en lo personalde cada mujer, así como la elaboración de consejos, síntomas y tratamientos.

La menopausia, es el período de transición en la vida de una mujer cuando los ovarios dejan de producir óvulos, su cuerpo produce menos estrógeno y progesterona, y la menstruación se vuelve menos frecuente, hasta que finalmente todo esto cesa.
Es una situación fisiológica, que afecta a todas las mujeres alrededor de los 50 años. Siendo una situación natural, frecuentemente tiene una serie de alteraciones acompañantes, que pueden ser evitadas o aliviadas, con un control médico adecuado.

La metodología de este trabajo esta en función de los objetivos propuestos, se pueden señalar los siguientes métodos y técnicas de análisis utilizadas: tras el análisis de la literatura y eyaculacion de los estudios realizados sin obviar ningún punto importante, se ha progresado en el conocimiento mediante la técnica de búsqueda de información.

Por ultimo, pero no menos importante concluyo sin mas que decir, agradeciendo principalmente, a mis padres, que son el motivo y el ejemplo a seguir para mi posterior desarrollo tanto como hija, estudiante y profesional. De igual manera, agradezco profundamente a todos y a cada uno de mis profesores, que día a día se dedican a guiarnos por el camino correcto y de la mejor manera, para poder aprender y ser buenos profesionales y personas integrales a futuro.
El término menopausia se emplea para indicar la cesación permanente durante un año o final de la función menstrual, y tiene correlaciones fisiológicas con la declinación de la secreción de estrógenos por pérdida de la función folicular (del griego mens que significa mensualmente, y pausi: cese).

Es un paso en un proceso lento y largo de envejecimiento reproductivo. Para la mayoría de las mujeres este proceso comienza silenciosamente alrededor de los cuarenta años, cuando la regla, o período, empieza a ser menos regular. La disminución en los niveles de las homonas estrógeno y progesterona causa cambios en su menstruación. Estas hormonas son importantes para mantener en buen estado de salud a la vagina y al útero, lo mismo que para los ciclos menstruales normales y para un embarazo exitoso. El estrógeno también ayuda a la buena salud de los huesos y a que las mujeres mantengan un buen nivel de colesterol en la sangre.

El síndrome menopáusico abarca todas las secuelas de la interrupción definitiva de la función ovárica de las cuales la ausencia de la menstruación es solamente una parte.
La mayoría de las mujeres llegan a la menopausia fisiológica a la edad de 45 – 50 años, pero la insuficiencia prematura del ovario puede presentarse antes de los 30 años. La menopausia precoz es más común en las mujeres que han padecido de una infección o de una afección quirúrgica en el aparato genital.

Muchas mujeres descubren que la menopausia les da una nueva perspectiva sobre la vida, a nivel físico, emocional, sexual y espiritual. Y las anima un nuevo entusiasmo de estar libres de la preocupación de un embarazo y la menstruación.

No obstante, algunas mujeres también sienten terror de llegar a la menopausia. Puesto que piensan que es una aflicción que las hará sentirse poco atractivas, solas, inútiles y desvalidas. Lamentan la pérdida de su fertilidad y juventud. Es muy posible que las mujeres experimenten un sinfín de sentimientos, desde ansiedad y molestias hasta liberación y alivio.
Es también interesante hacer notar que hay mujeres que nunca presentan evidencias de menopausia, mientras otros padecen intensamente y pueden sufrir psicosis. Aunque la función reproductora cesa, la menopausia nunca debilita la actividad sexual, a no ser que los factores psíquicos y la ignorancia produzcan una inhibición afectiva.

CICLO MENSTRUAL

La menstruación es la pérdida de sangre por vía vaginal debida a la descamación del endometrio, que se produce con un intérvalo aproximado de un mes, durante la vida reproductiva de una mujer, ésta perdida sanguinolenta se denomina período o flujo menstrual.
Basándose en los acontecimientos endocrinos, el ciclo menstrual se puede   en tres fases; una fase folicular dominada por las altas concentraciones de estrógenos; una fase ovulatoria en donde existe un pico de hormona Luteinizante y Folículo estimulante, las cuales propician el fenómeno de la ovulación; y una fase luteínica o postovulatoria en donde las concentraciones altas de progestágenos preparan el organismo de la mujerpara la posible implantación.
Simultáneamente con el ciclo ovárico se generan una serie de cambios a nivel endometrial, de   cíclico, que se producen en concordancia con los diversos acontecimientos orgánicos.
Los cambios cíclicos que se producen en el endometrio culminan en la menstruación. El endometrio, compuesto de glándulas y estroma, tiene tres capas: la capa basal, la capa esponjosa intermedia y la capa superficial de células epiteliales compactas, que cubre la cavidad uterina. La capa basal no se  durante las menstruaciones y regenera las otras dos capas que si se pierden. Dado que los cambios histológicos que se producen durante el ciclo menstrual son característicos, se pueden utilizar biopsias endometriales para determinar con exactitud la fase del ciclo y valorar las respuestas tisulares a los esteroides gonadales.
La menstruación es la pérdida de sangre por vía vaginal debida a la descamación del endometrio, que se produce con un intérvalo aproximado de un mes, durante la vida reproductiva de una  , ésta perdida sanguinolenta se denomina período o flujo menstrual.
El primer   de la menstruación es el día 1 del ciclo menstrual. La duración media de la menstruación es de 5(+/- 2) días. Aunque la media de la duración del ciclo menstrual es de 28 días,   el 10-15% de los ciclos normales tiene esa duración; el rango normal para un ciclo ovulatorio es de entre 25 y 36 días. La variación máxima de los intervalos intermenstruales se produce generalmente en los años que siguen a la menarquia y en los que preceden a la menopausia, cuando son más comunes los ciclos anovulatorios.
La pérdida sanguínea es de unos 130 ml por ciclo, con un rango desde 13 a 300 ml, siendo generalmente más copiosa en el 2º día. Habitualmente el sangrado menstrual no se coagula, a menos que sea muy copioso, probablemente debido a la presencia de fibrinolisina y de otros factores inhibidores de la coagulación.
Basándose en los acontecimientos endocrinos, el ciclo menstrual se puede dividir en tres fases.
1.    Unos 7-8 días antes de la oleada preovulatoria, la secreción estrogénica ovárica del folículo seleccionado, en particular estradiol, aumenta, lentamente en principio y luego con rapidez, hasta alcanzar su pico generalmente en el día previo a la oleada de LH. Este aumento de estrógenos se acompaña de un aumento lento pero constante de los valores de LH y de una disminución de los de FSH. La divergencia entre los valores de LH y de FSH puede deberse a la acción inhibidora sobre la FSH de los estrógenos junto con la acción específica por la inhibina. Antes de la oleada de LH, los valores de progesterona empiezan a aumentar de forma significativa.
2.    Fase Folicular (Preovulatoria): Comienza el primer día de sangrado y se extiende hasta el día anterior al aumento preovulatorio de la LH; es la fase más variable en cuanto a duración. En la primera mitad de esta fase, aumenta ligeramente la secreción de FSH, estimulando el  de un grupo de 3 a 30 folículos que han sido reclutados debido a su crecimiento acelerado durante los últimos días del ciclo precedente. Conforme descienden .los niveles de FSH, se selecciona   de estos folículos para ovular; éste madura y los demás sufren atresia. Los niveles circulantes de LH aumentan lentamente, a partir de 1-2 días tras la elevación de la FSH. La secreción de estrógenos y progesterona por los ovarios es relativamente constante y se mantiene baja en este período.
Durante el aumento de la LH, el folículo preovulatorio de hincha y protruye e el epitelio ovárico. Aparece un estigma o mancha avascular en la superficie del folículo. Se forma una pequeña vesícula en el estigma, la cual se rompe, y el agregado; es decir el oocito junto con algunas células de la granulosa, eclosiona. La producción de prostaglandinas por el mismo folículo, tal vez regulada por la LH y/o FSH, también parece esencial en el proceso ovulatorio. Las enzimas proteolíticas de las células de la granulosa y de las células epiteliales que se encuentran sobre el folículo preovulatorio, factores de crecimiento locales y citocinas parecen desempeñar un papel importante en la rotura del folículo. El oocito permanece en la profase meiótica hasta el momento posterior al pulso de LH. En las siguientes 36 hrs. El oocito completa su 1º división meiótica, en la que cada célula recibe 23 cromosomas de los 46 originales ye s expulsado el primer corpúsculo polar. En la segunda división meiótica, en la cual cada cromosoma se divide longitudinalmente en pares idénticos, no se completa ni se elimina el 2º corpúsculo polar a menos que el huevo sea penetrado por un espermatozoide.
3.    Fase Ovulatoria: En esta fase una serie de complejos acontecimientos endocrinos culminan en la oleada de LH; la liberación masiva preovulatoria de LH por la hipófisis. La liberación ovulatoria de LH se produce en parte como consecuencia de una retroacción estrogénica positiva. Se produce simultáneamente un incremento menor de la secreción de FSH, cuyo significado se desconoce. Al aumentar los valores de LH, bajan los de estradiol, pero las concentraciones de progesterona siguen aumentando. La oleada de LH dura típicamente 36-48 horas y consta de múltiples y amplias oleadas de LH liberadas de forma pulsátil. La oleada de LH, que da lugar a la madurez del folículo, es necesaria para la ovulación, que ocurre 16-32 horas después del inicio de la oleada. Se desconoce el mecanismo que causa la ovulación.
4.    Fase Lútea (Posovulatoria): En esta fase las células de la teca y la granulosa, que constituyen el folículo, se reorganizan para formar el cuerpo lúteo (cuerpo amarillo), que da nombre a esta fase. La duración de esta fase es la más constante, un promedio de 14 días en ausencia de embarazo, finalizando con el primer día de la menstruación. La duración de esta fase proviene de la duración de la fase funcional del cuerpo lúteo, que segrega progesterona y estradiol durante unos catorce días, degenerando posteriormente si no se produce la fertilización. El cuerpo lúteo mantiene la implantación del óvulo fecundado, segregando progesterona en cantidades crecientes, alcanzando un pico de 25 mg/d en los 6-8 días posteriores a la oleada de LH. Debido a que la progesterona es termogénica, la temperatura basal aumenta en por lo menos 0.5 ºC en la fase lútea y se mantiene elevada hasta la menstruación. Las prostaglandinas y el IGF-II pueden desempeñar un papel en la regulación del tiempo de vida del cuerpo lúteo; sin embargo, poco se sabe sobre ello en la actualidad.
Si se produce la fertilización la Gonadotropina Coriónica Humana (HCG) del óvulo fecundado mantiene al cuerpo lúteo hasta que la unidad fetoplacentaria puede mantenerse a si misma endocrinológicamente. La HCG es estructural y funcionalmente similar a la LH. Durante casi toda la fase lútea, los niveles de LH y FSH circulantes disminuyen y se mantienen bajos durante la mayor parte de la fase lútea, pero comienzan a aumentar nuevamente con la menstruación.
El inicio del ciclo endometrial esta enmarcado por la pérdida mensual del epitelio durante la menstruación. Tras la menstruación solo una fina capa de estroma permanece indemne y las únicas células epiteliales que quedan son las localizadas en las porciones profundas de las glándulas y criptas del endometrio.
Fase Proliferativa (estrogénica): bajo la influencia de los estrógenos, que se secretan en cantidades crecientes durante la fase proliferativa, las celulas del estroma y las células epiteliales proliferan rápidamente. La superficie endometrial se reepiteliza completamente en 4 a 7 días tras la menstruación. Durante el periodo previo a la ovulación el endometrio se espesa, e parte debido al creciente numero de celulas del estroma, pero primordialmente al crecimiento progresivo de las glándulas endometriales y de nuevos vasos sanguíneos en el interior del endometrio. Al momento de la ovulación el endometrio tiene unos 3 a 5 milímetros de espesor. Las glándulas endometriales, especialmente las de la región cervical secretan un moco poco denso, filante.
Fase Secretora (Progestacional): posterior a la ovulación, se secretan grandes cantidades de progesterona y estrógenos por parte del cuerpo lúteo. Los estrógenos producen una ligera proliferación adicional del endometrio, mientras que la progesterona provoca una notable tumefacción y eldesarrollo secretor del endometrio.
Las glándulas se vuelven mas tortuosas; y en las celulas del epitelio glandular se acumula un exceso de sustancias secretoras. Igualmente aumenta el citoplasma de las células del estroma junto al depósito de lípidos y proteínas; y el aporte sanguíneo al endometrio sigue incrementándose de forma proporcional al desarrollo de la actividad secretora, con gran tortuosidad de los vasos sanguíneos. En el momento culminante de la fase secretora, aproximadamente una semana después de la ovulación, el endometrio tiene un espesor de 5 a 6 mm.
Menstruación: La menstruación se debe a la supresión repentina del influjo estrogénico y progestacional, al final del ciclo ovárico mensual. El primer efecto es la disminución de la estimulación de las células endometriales por estas dos hormonas, seguido de la rápida involución del propio endometrio a un espesor aproximado del 65% del inicial.
Posteriormente los tortuosos vasos sanguíneos sufren vasoespasmo, posiblemente a causa de algún efecto de la involución, como la liberación de un material vasoconstrictor, probablemente prostaglandinas, que abundan en ese momento. El vasoespasmo, la disminución de nutrientes del endometrio, y la pérdida de la estimulación hormonal provocan una necrosis incipiente del endometrio.
Gradualmente las capas necróticas del endometrio se separan del útero en estas zonas de hemorragia hasta que, unas 48 horas después del inicio de la menstruación todas las capas superficiales se han escamado. La masa de tejido descamado y de sangre en la cavidad uterina, mas los efectos contráctiles de las prostaglandinas u otras sustancias, inician las contracciones uterinas que expulsan el contenido uterino
Cuello Uterino: Durante la fase folicular se produce un aumento progresivo de la vascularización cervical, de la congestión, del edema y de la secreción de moco cervical. El orificio cervical externo se abre hasta alcanzar un diámetro de 3mm en la ovulación, reduciéndose posteriormente a 1 mm. El incremento progresivo de los estrógenos provoca un aumento de 10-30 veces en la cantidad de moco cervical. Las características del moco cervical son útiles clínicamente para evaluar la etapa del ciclo y el estado hormonal de la paciente.
La elasticidad (filancia) aumenta y la arborización se hace evidente justo antes de la ovulación. Esta imagen es el resultado de un aumento de NaCl en el moco cervical por la influencia estrogénica. Durante la fase luteínica, bajo la influencia de progesterona, el moco cervical se espesa, se hace menos acuoso y pierde su elasticidad y capacidad para formar arborizaciones en helecho.
Vagina: La proliferación y la maduración del epitelio vaginal también se ven influidas por los estrógenos y la progesterona. Cuando al inicio de la fase folicular la secreción de estrógenos ováricos es baja, el epitelio vaginal es delgado y pálido.
A medida que aumentan os niveles de estrógenos en la fase folicular, las células escamosas maduran y se cornifican, engrosándose el epitelio. Durante la fase luteínica, el número de células intermedias precornificadas aumenta, y se incrementa el número de leucocitos y detritos a medida que se van desprendiendo las células escamosas maduras. Los cambios del epitelio vaginal pueden cuantificarse histológicamente y utilizarse como índice cualitativo de la estimulación estrogénica.
                                                                                   

Sexualidad en el adolescente.



3.1 Sistema reproductor femenino y masculino                                                                                          Sólo es posible la reproducción si una célula germinal femenina (el ovulo) es fecundada por una célula germinal masculina (el espermatozoide). El sistema reproductor de la mujer está organizado para la reproducción de estos óvulos por los ovarios, y para acomodar y nutrir en el útero al feto en crecimiento durante nueve meses, hasta el parto. El sistema reproductor masculino  esta organizado para producir esperma y transportarlo a la vagina, desde donde podrá dirigirse hacia el óvulo y entrar en contacto con él.
El conjunto de los genitales femeninos externos constituye la vulva. En la parte frontal se encuentra el monte de Venus, una prominencia de tejido graso recubierta de vello, situada sobre la sínfisis del pubis. Por debajo te extienden dos repliegues de piel, los labios mayores, los cuales rodean a otros dos pliegues de menor tamaño, los labios menores. Por debajo de ellos, y situado anteriormente, se encuentra el clítoris, un pequeño órgano eréctil que constituye una importante fuente de excitación y que corresponde al pene masculino.
La abertura vaginal se encuentra entre los labios y está cerrada en las mujeres vírgenes por el himen, una fina membrana que normalmente se desgarra en el momento de realizar el primer coito, si bien puede romperse así mismo precozmente por la práctica de algún ejercicio violento o a consecuencia de alguna contusión.


La vagina es un tubo muscular de unos 10 cm de longitud, que rodea al pene durante el coito en ella se deposita el semen tras la eyaculación. El esperma asciende por la vagina y pasa por un estrecho cuello o cervix que señala el comienzo del útero, un órgano en forma de pera de unos 8 cm de longitud. Las dos trompas de Falopio, de unos 10 cm de longitud, conectan el útero con los ovarios.
La mayor parte del sistema reproductor masculino se encuentra en el exterior del cuerpo. Las partes visibles son el pene y los testículos. suspendidos en el saco escrotal. En estado normal el pene es flexible y flácido, peto se pone eréctil cuando el hombre es excitado sexualmente. La erección se produce al llenarse de sangre unos tejidos- esponjosos, llamados cuerpos cavernosos. Los dos testículos producen espermatoziodes continuamente en el interior de sus numerosos túbulos enrollados; estos espermatozoides se almacenan en un tubo muy largo, el epidídimo, el cual se enrolla sobre la superficie de cada testículo. El semen eyaculado no sólo contiene espermatozoides: en su mayor parte está compuesto por un fluido que produce en las vesículas seminales, la glándula prostática y las glándulas de Cowper. 

Los testículos están situados en el exterior del cuerpo. Están formados por un gran número  de tubos seminíferos, muy contorneados, en los cuales se producen los espermatozoides. Éstos maduran y se almacenan en el epidídimo hasta el momento del coito, en el que se expulsan por el conducto deferente. Los espermatozoides se forman a partir de células que tapizan las paredes de los tubos seminíferos, mediante sucesivas divisiones y transformaciones. El espermatozoide maduro consta de una cabeza que contiene el núcleo, una cola móvil y un segmento intermedio que proporciona la energía necesaria para el movimiento.

La vagina recibe durante el coito cientos de millones de espermatozoides. Para llegar al óvulo deberán realizar un largo viaje de 12 a 24 horas de duración. Los espermatozoides ascienden nadando por la vagina hasta alcanzar el útero. Allí son ayudados en su ascensión por la contracción de las paredes. Al llegar a la trompa de Falopio, la progresión de los espermatozoides es facilitada por los movimientos de unos cilios microscópicos que        recubren las paredes del órgano. Solamente unos cientos de espermatozoides suelen llegar el tercio superior de las trompas. Allí les espera el óvulo expulsado por el ovario. El óvulo será fecundado por un solo espermatozoide.
  En el hombre, la excitación sexual se caracteriza por la erección del pene. Durante la eyaculación, los músculos lisos que rodean la próstata, las vesículas seminales y el conducto deferente se contraen; de esta forma el semen es lanzado con tuerza al exterior del pene por cada contracción.
Los órganos genitales femeninos sufren varias modificaciones al pasar de su estado normal al de excitación y orgasmo. Entre ellas destacan la turgencia de los labios mayores, la erección del clítoris, la secreción vaginal y la contracción de las paredes vaginales y del útero en el orgasmo.
De los centenares de millones de espermatozoides expulsados en una eyaculación una cuarta parte son anormales.



3.1.1Meiosis y gameto genesis.                                                                                                                             La meiosis es un proceso en el que, a partir de una célula con un número diploide de cromosomas, se obtienen cuatro células hijas haploides, cada una con la mitad de cromosomas que la célula madre o inicial. Este tipo de división reduccional sólo se da en la reproducción sexual, y es necesario para evitar que el número de cromosomas se vaya duplicando en cada generación.
 El proceso de gametogénesis o formación de gametos, se realiza mediando dos divisiones meióticas sucesivas:
*Primera división meiótica: una célula inicial o germinal diploide se divide en dos células hijas haploides.
*Segunda división meiótica. Las dos células haploides procedentes de la primera fase se dividen originando cada una de ellas dos células hijas haploides.
Las fases de la meiosis son:
 PRIMERA DIVISIÓN MEIÓTICA:

*Interfase o fase de reposo. En una célula en la que hay una masa de ADN procendente del padre y otra procedente de la madre se va a iniciar una meiosis.
*Final de la interfase. Duplicación del ADN.
*Profase: Formación de los cromosomas.
*Profase: Entrecruzamiento. Los cromosomas homólogos intercambian sectores. El núcleo se rompe.
*Metafase: Aparece el huso acromático. Los cromosomas se fijan por el centrómero a las fibras del huso.
*Anafase: Las fibras del huso se contraen separando los cromosomas y arrastrándolos hacia los polos celulares.
*Telofase: Se forman los núcleos y se originan dos células hijas. Los cromosomas liberan la cromatina.
SEGUNDA DIVISIÓN MEIÓTICA
*Profase: Se forman los cromosomas y se rompe el núcleo.
*Metafase: Los cromosomas se colocan en el centro celular y se fijan al huso acromático.
*Anafase: Los cromosomas se separan y son llevados a los polos de la célula.
Telofase: Se forman los núcleos. Los cromosomas se convierten en cromatina y se forman las células hijas, cada una con una información genética distinta.
En los individuos machos, la gametogénesis recibe el nombre de espermatogénesis y tiene lugar en los órganos reproductores masculinos. En los individuos hembras, la gametogénesis recibe el nombre de ovogénesis y se realiza en los órganos reproductores femeninos.
La gametogénesis es el proceso de formación de gametos (células sexuales haploides) apartir de células germinativas (células diploides) mediante procesos meióticos que se llevan a cabo en las gónadas (testículos en los machos, ovarios en las hembras y ovotestes en los hermafroditas). La gametogénesis masculina o espermatogénesis da lugar a los espermatozoides (gametos masculinos) y la gametogénesis femenina u ovogénesis da lugar a la formación de óvulos.
La ovogénesis
La ovogénesis es el proceso de formación de los óvulos o gametos femeninos que tiene lugar en los ovarios de las hembras.
Las celulas germinales diploides generadas por mitosis, llamadas ovogónias, se localizan en los folículos del ovario, crecen y tienen modificaciones, por lo que reciben el nombre de ovocitos primarios. Éstos llevan a cabo la primera división meiótica, dando origen una celula voluminosa u ovocito secundario que contiene la mayor parte del citoplasma original y otra célula pequeña o primer cuerpo polar.

Estas dos células efectúan la segunda división meiótica; del ovocito secundario se forman otras dos células: una grande, que contiene la mayor parte del citoplasma original, y otra pequeña o segundo cuerpo polar. Los cuerpos polares se desintegran rápidamente, mientras que la otra célula se desarrolla para convertirse en un óvulo maduro haploide.
Recientes han considerado que en cada ovario se generan aproximadamente 400 mil óvulos. Se cree que todos ellos ya existen en el ovario de la recién nacida, aun cuando permanecen inactivos desde el nacimiento hasta la influencia de las hormonas en la pubertad.
En los seres humanos, el feto femenino empieza a formar ovogónias, pero se detiene el proceso de meiosis en la etapa de ovocito secundario hasta que, a partir de la pubertad y por efectos hormonales, se desprende un ovocito en cada ciclo menstrual; la segunda división meiótica ocurre después de efectuarse la penetración del espermatozoide. En los varones, la meiosis se inicia cuando el individuo alcanza la madurez sexual.


ESPERMATOGÉNESIS

La espermatogénesis se lleva a cabo en el epitelio de los túbulos seminíferos del testículo.
El epitelio del túbulo seminífero se llama: Epitelio seminífero ó germinal. Está compuesto por:
• Células espermatogénicas ó germinales
• Células de sostén ó sustentacular ó de Sertoli

Las células espermatogénicas forman a los espermatozoides siguiendo la siguiente secuencia:
• Espermatogonia
• Espermatocito I
• Espermatocito II
• Espermátide y
• Espermatozoide

La célula de sostén ayuda a las células espermatogénicas en sus funciones básicas como:
nutrición, sostén, protección, defensa, etc.
3.2 Adolescencia masculina y femenina
La adolescencia se refiere al tiempo entre el comienzo de la maduración sexual (pubertad) y la edad adulta. Es un tiempo de maduración psicológica, en el cual la persona se comienza a comportar "como un adulto".
La adolescencia se considera como el período entre los 13 y los 19 años de edad. El adolescente experimenta no sólo el cambio y crecimiento físico, sino también los cambios y el crecimiento emocional, psicológico, social y mental.
EN LAS NIÑAS
El desarrollo de las mamas es el signo principal de que una niña está entrando a la pubertad y a esto le sigue el primer período menstrual (menarquia).
Antes de la llegada de la primera menstruación, una niña normalmente tendrá:
*Un aumento en la estatura.                                                                                                    *Ensanchamiento de las caderas.                                                                                                  *Secreciones vaginales claras o blanquecinas.                                                                                                                          *Crecimiento de vello en el pubis, las axilas y las piernas.
Los ciclos menstruales ocurren aproximadamente en un período de un mes (28 a 32 días) y al principio pueden ser irregulares. Una niña puede pasar dos meses entre períodos o tener dos períodos en un mes, pero con el tiempo éstos se vuelven más regulares. Hacer un seguimiento de cuándo ocurre el período y de cuánto tiempo dura puede ayudarle a predecir cuándo debe tener su próximo período menstrual.
Después de que comienza la menstruación, los ovarios empiezan a producir y liberar óvulos, los cuales han estado almacenados en dichos ovarios desde el nacimiento. Aproximadamente cada mes, después de que empieza la menstruación, un ovario libera un huevo llamado óvulo, que baja por la trompa de Falopio, la cual conecta el ovario al útero.
Cuando el óvulo llega al útero, el revestimiento uterino se vuelve grueso con sangre y líquido. Esto sucede de tal suerte que si el óvulo es fertilizado, éste pueda crecer y desarrollarse en dicho revestimiento con el fin de producir un bebé. (Es importante recordar que la fertilidad llega antes que la madurez emocional y el embarazo puede ocurrir antes de que una adolescente esté preparada para la maternidad.)
Si el óvulo no se encuentra con el espermatozoide de un hombre y no es fecundado, se disuelve. El revestimiento que se ha engrosado se desprende y forma el flujo de sangre menstrual que sale del cuerpo a través de la vagina. Entre los períodos menstruales, puede haber un flujo vaginal claro o blanquecino, lo cual es normal.

Durante o justo antes de cada período, la niña puede sentirse de mal humor o emotiva y su cuerpo se puede sentir inflado o hinchado (distendido). El síndrome premenstrual (SPM) puede comenzar a desarrollarse, sobre todo a medida que la niña crece.
En las niñas, la pubertad generalmente termina a los 17 años, por lo que cualquier aumento de estatura después de esta edad es poco común. Aunque una niña haya alcanzado la madurez física completa en ese momento, la maduración educativa y emocional continúa.
PUBERTAD EN LOS NIÑOS
El primer signo de pubertad en los niños es el agrandamiento de ambos testículos. Después de esto, los niños normalmente experimentarán:
*Crecimiento acelerado, sobre todo de estatura.                                                                                     *Crecimiento de vello en el área de los brazos, la cara y el pubis.                                                                  *Aumento del ancho de los hombros.                                                                                            *Crecimiento del pene, del escroto (con enrojecimiento y pliegue de la piel) y los testículos.                                                                                                                                                 *Eyaculaciones durante la noche (emisiones nocturnas o "poluciones nocturnas").                               *Cambios en la voz.
Los testículos constantemente producen espermatozoides. Algunos espermatozoides se pueden almacenar en una estructura llamada epidídimo. Algunas veces, los espermatozoides almacenados son liberados como parte de un proceso normal para dar cabida a los espermatozoides nuevos. Esto puede ocurrir de forma automática durante el sueño (poluciones nocturnas) o después de una masturbación o una relación sexual. Las poluciones nocturnas son una parte normal de la pubertad.